«La Notafilia es Arte, es Cultura, es Historia, …¡Descúbrela!»
El ATOMIUM de Bruselas fue levantado en el parque Heysel con ocasión de la Feria Mundial de 1958, una Exposición General de primera categoría y primera que se realizaba después de la Segunda Guerra Mundial, que sirvió de exitoso escaparate a los países aliados occidentales y de oportunidad internacional a los países derrotados del eje nipón-italo-alemán.
Con una envergadura de 102m de alto, representa un cristal de hierro con sus átomos enlazados, aumentado de tamaño 165.000 millones de veces. Sus nueve esferas de 18m de diámetro y los enlaces entre ellas fueron diseñadas por el arquitecto André Waterkeyn, y aunque su montaje se preveía efímero (solo para seis meses), traspasó estas intenciones quedándose como reclamo turístico hasta la actualidad. Renovado en 2006, es propiedad de la entidad sin ánimo de lucro Atomium, que usa el interior de las esferas como lugar de exposiciones permanentes y temporales.


El billete de 20 francos de Bélgica de 1964 nos ofrece en su anverso una imagen del rey Balduino (rey belga entre 1951 y 1993). En su reverso veremos un grabado del Atomium, construcción de mediados de s. XX que ha pasado a ser para Bruselas lo que la Torre Eiffel para París, un emblema y reclamo turístico de primer orden.
Una parada en Bruselas, donde reside actualmente la capitalidad de la Unión Europea, debe llevarnos a contemplar, además de Atomium, la Grand Place con sus extraordinarias fachadas y edificios mezcla de arquitectura medieval y gótica, el Palacio del Cincuentenario con su Arco de Triunfo al estilo “Puerta de Brandeburgo”, El Palacio Real y …buscar el símbolo bruselense por excelencia: el Manneken Pis.
¡Yo estuve allí …en 2005!