
“La Notafilia es Arte, es Cultura, es Historia, …¡Descúbrela!”
Desde “Miscelánea” nos trasladamos hasta el lado americano del Atlántico Norte para recalar en un pequeño archipiélago vecino de Canadá, conocido como San Pedro y Miguelón. Son apenas ocho islas al sur de Terranova que forman parte de los Territorios de Ultramar de Francia. Su historia reciente situa a los portugueses desembarcando en las islas en los inicios del s. XVI, pero sería el gobierno francés quien se las anexó en el s. XVII cuando su pequeña población ser repartía entre indígenas canadienses y pescadores vascos y bretones. Las islas se poblarían y despoblarían, siendo foco de disputas entre ingleses y franceses, hasta que el Tratado de Paris en 1814 las devolvería a Francia. Fueron un puente de contrabando en los tiempos de la Ley Seca estadounidense, entre 1920 y 1933. Tras la 2ª Guerra Mundial decidieron pasar a ser Territorios del Ultramar de la República francesa.
Contemplaremos el peculiar billetario que circularía en sus islas en las décadas de los ’40 a ’60 del pasado siglo. Un artístico billetario que dio a conocer nobles, políticos y exploradores galos de los años dorados de las colonias, en los s. XVII y XVIII. Revisamos los ejemplares de San Pedro y Miguelón de 5 francos, 10 francos, 20 francos y 50 francos de 1950-60, así como las emisiones de 50 francos sobreimpreso 1 NF de 1960 y el ejemplar de 100 francos sobreimpreso 2NF de 1963.

Entre 1946 y 1955 la Caisse Centrale de la France d’Outre Mer emitió billetario para el archipiélago en francos. Fue a partir de 1960 cuando, coincidiendo con la llegada al poder en Francia de Charles de Gaulle (en 1958) y la instauración de la Quinta República (en 1960), se introdujo el “Nuevo franco o NF” cuyo cambio se estableció para esta colonia a 50 francos anteriores. En la revisión contemplaremos dos ejemplares con esta nueva monetización en forma de resello sobre el billete de valor anterior. Desde 1965 ya circularía solamente el franco francés, aunque el dólar canadiense sería aceptado igualmente. Actualmente tanto el euro como el dólar canadiense circulan con total aceptación en su territorio.

Sus anversos nos deleitan con una composiciones multicolores que nos presentan a famosos exploradores, políticos, navegantes o nobles de los siglos XVII al XIX presidiendo ejemplares con paisajes, cabañas y oriundos de las colonias tropicales de Ultramar, junto a galeones, carabelas y naos de época. Textos en francés con la firma de André Postel-Vinay como Le Directeur Général. Números de serie en tipografía negra y el nombre del territorio “SAINT PIERRE ET MIQUELON” repetido por duplicado tanto en anverso como en reverso.

Para los reversos mantienen los dibujos multicolores reproduciendo paisajes tropicales junto a habitantes indígenas y exuberante vegetación (composiciones algo desubicadas tratándose de unas islas del Atlántico Norte, pero que formaron parte de un billetario colonial muy repartido geográficamente).
Impresos por el Banque de France, los artistas responsables de estas magistrales viñetas fueron Georges André Klein, Paul Munier y William Fel, de la mano de los ilustradores Beltrand, Chapon, Broutin, Magd, Regnier y Armanelli.


El billete de 5 francos de San Pedro y Miguelón de 1950-60 nos ofrece en el anverso a Louis Antoine de Bougainville (1729-1811), explorador francés y almirante de la fragata “La Boudeuse”, que le acompaña en el grabado y que serviría en la guerra entre Francia y los estados de Norteamérica en el siglo XVIII. En el reverso una nativa con un colorista atuendo típico junto a frutas tropicales en un paisajes de palmerales, maizales, montañas y casa colonial.


El billete de 10 francos de San Pedro y Miguelón de 1950-60 nos muestra en el anverso a Jean Baptiste Colbert (1651-1690), marqués de Seignelay y Secretario de la Marina con el rey Luis XIV; completó el “Código Negro –Code Noir-” o decreto que definía las condiciones de exclavitud en el Imperio colonial francés, que sería aprobado por el rey francés en 1685. Completan la escena veleros surcando el mar cerca de la costa. Para el reverso una piragua en un lago entre exuberantes paisajes con arboles y frutas tropicales.


El billete de 20 francos de San Pedro y Miguelón de 1950-60 nos ofrece al anverso a Émile Gentil (1866-1914), líder militar francés y navegante que administraría diferentes colonias del África francesa. La composición se completa con una vista de un poblado africano de chozas y colonos negros. El reverso nos ofrece dos hombres oriundos africanos en un entorno lacustre.


El billete de 50 francos de San Pedro y Miguelón de 1950-60 nos deleita en el anverso con Pierre Bélain d’Esnambuc (1585-1637) junto a un galeón surcando el océano. Pierre Bélain d’Esnambuc fue un navegante francés del s. XVI (1585-1637) que expandió la colonización francesa en los territorios del Caribe, estableciendo la primera colonia gala de América central en la isla de la Martinica en 1635, sufragado por el Cardenal Richelieu y para el rey Luis XIII. Le siguieron la Guyana francesa, Guadalupe, San Pedro y Miguelón, y varias de las Antillas (que compartiría con los ingleses). El reverso nos ofrece la imagen de una nativa semidesnuda apoyada en una lanza sobre un colorista escudo y delante de una cabaña.


El billete de 50 francos de San Pedro y Miguelón sobreimpreso 1NF de 1960 es una edición similar al anterior en la que se ha revalorizado con el contravalor de la nueva moneda “Nuevo Franco”, que queda expuesta con sobreimpresiones azules, de texto y número, en la zona circular blanca sobre la marca de agua. Este ejemplar rescata una emisión de la isla africana de La Reunión donde se ha tachado su procedencia mediante líneas horizontales sobre el texto de su ubicación primitiva.


El billete de 100 francos de San Pedro y Miguelón sobreimpreso 2NF de 1963 está presidido en su anverso por Bertrand-François Mahé (1699-1753), conde de La Bourdonnais y capitán de la Marina francesa que estuvo al servicio de los portugueses en Goa (India) y posteriormente gobernaría para la colonia las islas africanas de Mauricio y La Reunión. Le acompañan en la composición dos jóvenes nativas con frutas tropicales. El contravalor de 2NF se muestra sobre la marca de agua en sobreimpresión roja. Para el reverso un paisaje de montañas y palmeras y la cabeza y torso ladeado de una joven enjoyada.

Las marcas de agua en los valores pequeños son filigranas de anclas y barcos. Para los valores mayores la cabeza ladeada de Ceres, diosa de la Agricultura, la Fecundidad y las Cosechas (en el ejemplar de 50 francos) y la cabeza de una dama con gorro frigio (en el ejemplar de 100 francos).

Artística muestra de un billetario colonial universal para un territorio algo “desubicado” en cuanto a sus grabados. ¡Espero que os guste!