
“La Notafilia es Arte, es Cultura, es Historia, …¡Descúbrela!”
Desde “Miscelánea” bajaremos hasta el África austral, para situarnos en el territorio que cierra el continente por ese polo. Sudáfrica se encuentra entre los océanos Atlántico e Índico a través de casi 3000 km de costa. Su historia cercana comienza en el s. XV con un breve contacto portugués, seguido de una colonización holandesa entre 1652 y 1806 y una cesión a partir de entonces a los ingleses.
El país sufriría entre finales del s. XIX y comienzos de XX las guerras anglo-boers (o de los primeros británicos contra los ya asentados colonos holandeses). Tras la WWII se instauró un sistema conocido como “apartheid” de clara segregación racial entre negros y blancos, con grandes privilegios para esto últimos. En 1961 Sudáfrica pasó a proclamarse país independiente bajo el gobierno de una República, pero no sería hasta 1989 cuando se iniciase el desmantelamiento del apartheid. ¡En 1990 fue liberado Nelson Mandela!
Esta vez no nos acercaremos temporalmente tanto, ya que vamos a revisar su billetario del primer tercio-mitad del siglo XX. Contemplaremos las emisiones de chelines (shillings) y libras (pounds) entre 1925 y 1943, más concretamente los billetes de Sudáfrica de 10 chelines de 1945, 1 libra de 1939, 5 libras de 1931 y 10 libras de 1943. Emitidos por el South African Reserve Bank e impresos por St. Lukes Printing Works de Londres.

Sus anversos nos muestran una panorámica de la costa de Ciudad del Cabo con la Montaña de la Mesa (Table Mountain) al fondo y escenas de porteadores en tareas agrícolas, pastores con ganado, vías ferroviarias, factorías industriales y vida campestre; una populista multicomposición fiel reflejo de la sociedad del momento en plena actividad.
Aunque lo que llama realmente la atención es el magistral dibujo de un galeón holandés presidiendo la parte izquierda del anverso, bajo un sol radiante tratando de iluminar toda la escena. Textos en inglés y en africaans (dialecto colonial holandés) y nºs de serie en tipografía negra con la letra de serie en formato fracionario.

Sus reversos ofrecen al centro el escudo de armas de Sudáfrica de la época, entre textos en inglés y africaas del Banco y del valor de cada billete. El escudo de armas es un diseño de Arthur Holland de 1910. Presenta cuatro cuarteles; de izquierda a derecha y de arriba abajo vemos la Dama de la Buena Esperanza (provincia del Cabo), dos ñus (provincia de Natal), un naranjo (provincia de Orange) y una carreta de bueyes (provincia de Transvaal).

Coronado por un león con una de sus garras sobre cuatro bastones, representando las cuatro provincias simbolizadas en los cuarteles anteriores. A los lados del blasón una gacela “springbok” y un orix “gemsbok”. Se apoyan sobre una colina de hierba abrazada por una banda con el texto “EX UNITATE VIRES” (Unión es Fuerza).


El billete de 10 chelines de Sudáfrica de 1945 en el único que no ofrece directamente dibujos en su composición, solo textos y algún cicloide. De cromaticidad predominante rosácea lleva la firma de Michiel Hendrik de Kock como Governor President. Su reverso el escudo de armas de la época.


El billete de 1 libra de Sudáfrica de 1939 nos ofrece en el anverso el galeón holandés y la estampa aérea costera de Ciudad del Cabo en total actividad. De cromaticidad azul grisácea lleva la firma de Johannes Postmus como Governor President. Su reverso el escudo de armas de la época en tonalidad gris.


El billete de 5 libras de Sudáfrica de 1931 nos muestra al anverso nuevamente el galeón con la panorámica costera en plena actividad. Cromaticidad verde en anverso y reverso y firma de William Henry Clegg como Governor President.


El billete de 10 libras de Sudáfrica de 1943 nos ofrece los mismos anversos y reversos que los anteriores, en cromaticidad amarronada al anverso y gris púrpura al reverso. Lleva la firma de Johannes Postmus como Governor President.

Las marcas de agua nos presentan cabeza y torso del héroe sudafricano Jan Van Riebeeck (o Johan Anthoniszoon), holandés que fuera Administrador colonial en Sudáfrica entre 1652 y 1662, con lo que se trata del primer holandés que se hizo cargo del asentamiento de la Compañía de las Indias Orientales en esa tierra africana.

La marca de agua del ejemplar de 10 chelines de 1945 nos muestra por partida doble, a izquierda y derecha, el galeón y el torso de Jan Van Riebeek.
Exquisitos diseños que no hacen más que fomentar la pasión por la Notafilia. ¡Espero que os sorprendan!